jueves, 10 de abril de 2014

Esta es la operación más importante de mantenimiento de la bicicleta y también la más olvidada, porque, al menos para mí, es bastante coñazo. Sin embargo, debería hacerse después de cada salida si hay restos de barro o polvo, o cuando observemos que la suciedad empieza a hacerse visible, especialmente en la transmisión, lo que equivale una vez cada no muchas salidas (depende bastante del terreno). Un buen mantenimiento en este sentido alargará la vida de los componentes de la bici y evitará problemas en el cambio, la frenada y molestos chirridos.
El material que vamos a necesitar es el siguiente:
  • cubo (y si disponemos de una manguera mejor que mejor)
  • líquido lavavajillas (biodegradable si es posible)
  • esponja
  • cepillo grande y cepillo específico para bici (en su defecto un cepillo de dientes)
  • trapo
  • desengrasante (opcional)
  • aceite específico para bicicleta
Y si disponemos de un caballete pues ya lo bordamos.
Hay gente que lava la bici con una manguera de lavado a presión de coches. Es una verdadera tentación  pero absolutamente desaconsejable. Y sobre todo, jamás hay que proyectar directamente el chorro a presión  sobre los bujes o los pedales . Por muy estancos que sean les puede entrar agua, algo nefasto para los rodamientos.
Dicho esto, veamos por etapas como proceder al LAVADO.
  • Lo primero será dar un remojó general a la bici con el cubo lleno de agua (sin detergente) y la esponja. Si tenemos una manguera podemos darle una ducha en plan aspersor e insisto, con cuidado de no apuntar a los bujes ni al pedalier.
  • Si la bici tiene barro en los bajos y la transmisión lo eliminamos a golpe de cepillo y agua. La parte dentada de plástico del cepillo para bicis sirve para eliminar el barro entre los piñones.
  • sillín será suficiente la esponja (atención a los sillines de cuero o los que no se puedan lavar directamente). Después atacaremos con el cepillo para eliminar todo resto de suciedad y grasa, especialmente en la transmisión (piñones, platos, desviadores, cadena, pedales y bielas) y las levas de los frenos (V Brake). Con el cepillo para bicis limpiaremos los rincones más inaccesibles. También limpiaremos las ruedas (llanta y neumático por si hubiera esquirlas que pudieran causar un pinchazo). El objetivo final es desengrasar las partes de la bici que están lubrificadas ya que posteriormente engrasaremos sobre limpio (ni que decir tiene que NUNCA hay que engrasar una transmisión sin limpiar y desengrasar previamente: sólo conseguiremos que se forme una pasta grasosa de suciedad muy perjudicial para el buen funcionamiento de la bici).
  • Si tenemos desengrasante en spray especial para bicis p
Cepillos específicos para limpiar la bicicleta
  • Una vez eliminado lo gordo pasamos al lavado propiamente dicho, esta vez llenando el cubo con agua jabonosa (cualquier lavavajillas va bien) y caliente si es posible. Para el cuadro, la horquilla, el manillar y el odemos usarlo para un acabado impecable, pero con paciencia podemos conseguir el mismo resultado con agua jabonosa y de forma más ecológica. Pero ojo, nunca rociaremos desengrasante sobre los bujes o el pedalier.
  • Un componente que merece especial cuidado es la cadena. La limpiaremos con el agua jabonosa y el cepillo de bici, parte plana. Después, con la rueda trasera en el aire (hay que buscarse la vida si no tenemos caballete), giramos los pedales y la secamos con el trapo entre los dedos. Podremos ver como aún queda grasa que va pasando al trapo. Hacemos esto usando diferentes partes del trapo para terminar de limpiarla lo mejor posible.
  • Después, aclaramos con la manguera en plan aspersor o con el cubo de agua y la esponja.
  • Y para terminar, secado con un trapo limpio.
Entramos en la fase de LUBRICACIÓN. Usaremos aceite especial para bicicletas. Los componentes a lubricar son:
  • Cadena. Mientras giramos los pedales ponemos unas gotitas de aceite a lo largo de toda la cadena, en su parte interior y en el tramo que queda en la parte baja. Si lo hacemos en la parte exterior del tramo de cadena que queda arriba, la fuerza centrifuga provocada al girar los pedales hace que el aceite penetre peor en los eslabones de la cadena. Cuando la cadena esté bien lubricada seguimos girando los pedales y cambiamos a todos los piñones y platos para que estos se lubriquen a su vez con el propio aceite de la cadena. No hay poner mucho aceite, unas gotitas a lo largo de todo el tramo de cadena bastarán.
  • Desviadores. Echamos una gota (literalmente una gota) de aceite en cada extremo del eje de giro de los paralelogramos y de los ejes principales del cuerpo y de cada roldana del desviador trasero. A continuación los movemos con la mano para que el aceite penetre bien. De nuevo damos unas vueltecitas de pedal pasando por todos los piñones y platos.
  • Frenos. Ponemos una gota en el eje de giro de cada leva de freno y accionamos sucesivas veces las manetas para que penetre.
  • Cables de desviadores y frenos. Desencajamos los tramos de camisa de los cables para acceder a ellos. Los limpiamos con un trapo (si están oxidados habrá que cambiarlos) y les echamos una gotita de aceite (o grasa) que extenderemos con los dedos a lo largo del mismo. Esto hace que el cable corra bien dentro de la camisa y no haya problemas de imprecisión en el cambio o en la frenada.
  • Ejes de giro del sistema de blocaje en pedales automáticos.
Aceites para bicicleta. En spray y en bote (de aplicación más precisa)
Por último, hay ciertas operaciones de ENGRASE que se pueden realizar una o dos veces al año. Esta vez utilizaremos grasa para bicicletas y no aceite. La grasa se utiliza generalmente para piezas donde hay rodamientos (juego de dirección, bujes y pedalier) o para evitar el gripaje y conseguir la estanqueidad de ciertos elementos (tornillería, rosca del pedalier, tija del sillín y potencia a rosca). El aceite es necesario para la lubricación de elementos donde hay articulaciones mecánicas (transmisión y frenos). Las operaciones anuales son:
  • Limpieza y engrase de la tija del sillín. La desmontamos, la limpiamos eliminando la grasa vieja tanto de la tija como de la parte interior del tubo del cuadro donde se aloja, la engrasamos y la volvemos a montar (antes de sacarla marcar el nivel al que está fijada para volver a montarla en su posición exacta). Esta operación es importante porque evita que pueda entrar agua en el interior del cuadro y además elimina posibles chirridos.
  • Engrase de la tornillería. Los tornillos de la bici generalmente son de acero y se pueden oxidar con el paso del tiempo. Es conveniente poner una gotita de grasa en la parte de la base de la cabeza del tornillo, especialmente en los de la tija del sillín y la potencia (Ahead).
  • Si nuestra bici tiene potencia clásica de rosca, hay que desmontar, limpiar, desengrasar y volver a engrasar sus componentes: la tija, la pipa, el tornillo y la tuerca.
En cuanto al juego de rodamientos de la dirección normalmente no habrá que tocarlo. Yo sólo he desmontado el mío una vez después de muchos años para limpiarlo y engrasarlo, porque se agarrotaba un poco. Es una operación que hay que hacer con cuidado y sólo si es necesario. Si tenemos algún problema con la dirección lo mejor es llevar la bici al taller para que nos sustituyan los rodamientos.

miércoles, 9 de abril de 2014

Los beneficios de montar en bicicleta

¿Montas en bicicleta por placer, por estar en forma, por hacer amigos, por tener unas piernas bonitas...? Pues une a todas estas una razón más: te presentamos conclusiones de estudios que demuestran los beneficios de montar en bicicleta para la salud. Si no has probado todavía a montar en bicicleta y pedalear en serio... ¡engánchate a los pedales! vas a comprobar en poco tiempo los beneficios de montar en bicicleta en tu salud. Diversos estudios muestran los beneficios y las bondades del ejercicio de la bicicleta. Está clínica mente comprobado que es una de las actividades más completas y universales para prevenir dolores de espalda, proteger articulaciones y mejorar el sistema circulatorio e inmunológico, así como mantener tu salud psíquica en orden.

lunes, 7 de abril de 2014

Tipos de bicicletas 


bicicleta_h_brida.jpg
Híbrida: Esta bicicleta, llamada también "de ciudad,es una mezcla de Mountainbike pero con accesorios de una bici urbana, como parrilla, guardabarros,sillín diferente, etc., es ideal para para transportarnos día a día por una ciudad de terrenos irregulares.





bmx.jpgCross o BMK: La favorita para hacer tricks y volar. La característica principal de estas bicicletas es su tamaño inferior a los otros modelos, tanto en estructura como en sus ruedas (las cuales generalmente no superan el aro 20’). Esto es porque su uso principal es hacer malabares, trucos, acrobacias, tricks, etc. Una característica general de etsa bici es que generalmente los cables de frenos se encuentran dentro de la estructura, para permitir rotar el manubrio en 360°.


pistera.jpgPistera: Las pistera, o media pista como se suele llamar, es muy fácil de reconocer por su forma delgada, ligera, neumáticos angostos. Están fabricadas especialmente para alcanzar altas velocidades y por lo general no tienen cambios. Es la elegida entre los deportistas para hacer ciclismo de alta competencia en todo el mundo. En los últimos años, ha sido muy usada entre ciclomensajeros y por jóvenes urbanos en todo el mundo, que la prefieren poir su diseño y rapidez.












Historia 
En 1816, un noble alemán diseñó el primer vehículo de dos ruedas con dispositivo de dirección. Esta máquina, denominada draisiana (en honor a su inventor), tenía un manillar que pivotaba sobre el cuadro, permitiendo el giro de la rueda delantera. Después, inventores franceses, alemanes y británicos introdujeron mejoras. En Inglaterra, estos primeros modelos se conocieron como balancines; el nombre de dandy horse quedó para el vehículo inventado en 1818. El balancín era más ligero que la draisiana y tenía un asiento ajustable y un apoyo para el codo. Fue patentado en Estados Unidos en 1819, pero suscitó poco interés.





Una bicicleta de pista' o bicicleta de sprint es una bicicleta de carreras optimizada para ser utilizada en un velódromo o pista al aire libre. A diferencia de bicicletas de carreras, la bicicleta de pista es una bicicleta con un sistema de piñón fijo que hace que se frene aplicando gradualmente menor presión en el pedaleo. Los neumáticos son estrechos y se inflan a alta presión para reducir la resistencia de la rodadura. Los neumáticos tubulares son de uso frecuente, pero avances en los neumáticos ligeros de cubierta están dejando a un lado a los tubulares. Las llantas pueden ser de aluminio, titanio o fibra de carbono.
Se construyen en diferentes tallas o medidas y están fabricados en materiales variados, desde los más pesados y resistentes como el acero de cromo-molibdeno, hasta los más ligeros de aluminio, titanio, bambú o fibra de carbono.
La longitud máxima de la bicicleta de pista es de 2 m, y pesa entre 7 y 8.5 kg. El marco es triangular, y el sillín es igual al de cualquier bicicleta de carrera.